
Las ventanas que te dejan dormir seguro
Cualquier padre o madre de familia comparte en un momento u otro la misma preocupación: cómo proteger a los míos en nuestro propio hogar. El bombardeo de mensajes es imparable sobre posibles amenazas: robos, vandalismo, ‘okupas’ y otros riesgos. Sin caer en la psicosis de ‘La habitación del pánico’ (David Fincher, 2002), sí hay medidas razonables y prácticas que te harán sentir más seguro: unos cerramientos resistentes en puertas y ventanas.
Según un estudio realizado por la empresa de seguridad Securitas Direct, el 57% de las intrusiones en las viviendas se realizan por la ventana. Por la puerta solo el 18%. Así lo revela el informe sobre afectados por robo en viviendas elaborado por TNS Sofres para la compañía escandinava de seguridad. En menor medida se utilizan otros puntos de entrada, como los garajes, en un 5% de los casos.
En el 70% de los casos, los ladrones visitaron el dormitorio principal, y en un 30% el cuarto de los niños. En el 35% de los casos recorrieron todas las habitaciones de la casa
La preocupación ante la posibilidad de un robo en nuestro domicilio, o la experiencia traumática de haberlo padecido, son los peores efectos de estos asaltos por la fuerza en nuestro territorio privado, pero no los únicos. Los intrusos sustrajeron objetos de valor en 7 de cada 10 robos. Y no siempre es útil esconderlos. Los ladrones encontraron las piezas valiosas en un un 36% de los casos. Un 55% de las víctimas asegura que se llevaron objetos personales de valor sentimental.

Una puerta exterior es lo primero que se ve de nosotros.
Para evitar sustos desagradables, la misma empresa de seguridad aconseja revisar el estado de las cerraduras y puertas antes de marcharse de casa. Nunca dejar las ventanas abiertas, aunque la mejor manera de proteger la casa es elegir una ventana de calidad. Cuanto más resistente y sólida sea la ventana, más dificultades presentará a los atacantes, que deciden si continuar el asalto o marcharse en función de los obstáculos que encuentran en el proceso, ya que el factor tiempo juega en su contra. Siempre elegirán una vivienda desprotegida de medidas de seguridad, como ventanas fuertes, con herrajes sólidos y sistemas antipalanca.
¿Qué elementos hacen que una ventana nos proteja?
LOS PERFILES DE SEGURIDAD. Son los marcos que recubren las ventanas. Suelen tener varias cámaras y refuerzos de acero. Junto a la precisión de las juntas, convierten las ventanas de Kommerling en un auténtico sistema antirrobo.
ESQUINAS SOLDADAS. Además de la resistencia de los perfiles, dotados con un refuerzo metálico interno, las ventanas Kommerling presentan una mayor capacidad de resistencia a los golpes en las esquinas, donde los perfiles están soldados térmicamente, sin pegamento ni tornillos. El resultado es una soldadura homogénea, que parece de una pieza, lo que supone una mejora tanto mecánica como estética.
PVC, EL MATERIAL MÁS RESISTENTE AL IMPACTO. Por naturaleza, el PVC es un material duro, pero con las modificaciones de su fórmula molecular realizadas por el sistema Kommerling, presenta una elevada resistencia al impacto.
LOS HERRAJES DE SEGURIDAD. Existen muchos tipos de herrajes dependiendo del nivel de seguridad necesario. Los perfiles Kommerling se combinan con los más sofisticados sistemas antirrobo.
LOS VIDRIOS ANTIGOLPES. Elegir un grosor de vidrio adecuado nos aportará seguridad y asilamiento. Lo mejor es pedir el consejo de los expertos. Kommerling dispone de diversos modelos, entre ellos el que combina dos o más placas de vidrio, intercalando entre ellas una o más láminas de Polivinilo Butiral de 1 milímetro que refuerza la resistencia del vidrio. Consulte con el experto si además quiere proteger su vivienda del viento, de los ruidos o incorporarle un filtro solar.
Puedes consultar a los expertos de JACEMA sobre opciones y formas de financiación, sin ningún compromiso.
“La felicidad para mí consiste en gozar de buena salud, en dormir sin miedo y despertarme sin angustia.”
(Françoise Sagan, escritora francesa, 1935-2004)